Detrás está una tecnología usada por grandes plataformas y que ahora Google promete abandonar por completo.
El gigante de internet se comprometió a no reemplazar las cookies de terceros que siguen al usuario por la web, un mecanismo utilizado para ofrecer publicidad personalizada, una vez que las elimine de su navegador.
Google, uno de los vendedores de anuncios más grandes del mundo y dueño del navegador más popular, Chrome, ya adelantó a principios de 2020 su intención de eliminar las controvertidas cookies de terceros pero ahora va más allá asegurando que no las sustituirá por otra tecnología similar.
Con su decisión, Google sigue los pasos de otras plataformas que proveen buscadores al eliminar las llamadas cookies de terceras partes.