La prueba se desarrolló después de que investigadores de la Universidad de Queensland descubrieron que el cáncer forma una estructura de ADN única cuando se coloca en el agua.
El examen funciona identificando la presencia de esa estructura, un descubrimiento que podría ayudar a detectar el cáncer en humanos mucho antes que los métodos actuales, según el artículo publicado en la revista Nature Communications.
circulante normal fue un gran avance que ha permitido un enfoque completamente nuevo para detectar el cáncer de forma no invasiva en cualquier tipo de tejido, incluida la sangre", dijo el profesor Matt Trau en un comunicado.
"Esto llevó a la creación de dispositivos de detección económicos y portátiles que podrían usarse como una herramienta de diagnóstico, posiblemente con un teléfono móvil", agregó.
El co-investigador Abu Sina dijo que los hallazgos representan un "descubrimiento significativo" que podría ser un "gran cambio" para la detección del cáncer.
"El cáncer es una enfermedad complicada, [y actualmente] cada tipo tiene un sistema diferente de prueba y detección. En la mayoría de los casos, no existe una prueba general para evaluar su estado.
"Ahora, las personas solo acuden [a la revisión] si tienen síntomas. Queremos que [el examen de detección de cáncer] sea parte de un chequeo regular".