El asteroide mide aproximadamente 1,1 kilómetros, lo que le hace más grande que el edificio más alto del mundo, el Burj Khalifa de Dubái, que tiene 800 metros de altura.
Según cálculos de la NASA, el asteroide debería pasar a una distancia de 4,2 millones de kilómetros de la Tierra, lo que se entiende como una distancia bastante cercana en la escala espacial.
Con ello, se definen como "peligrosos" los asteroides que se encuentran en un radio menor de 7,4 millones kilómetros de nuestro planeta.
Consecuencias severas en caso de impacto
Los científicos del Centro Nacional de Investigación Atmosférica (EE.UU.) advierten que si el asteroide impacta contra la Tierra, las consecuencias tendrían un carácter "global muy severo" y durarían varios años. Nuestro planeta se convertiría en un lugar mucho más oscuro, frío y seco.
En el "peor de los casos", el hollín permanecerá en la atmósfera durante unos 10 años, mientras que el polvotardaría seis años en asentarse. Las temperaturas promedio en todo el mundo bajarían hasta los 8°C.
No obstante, la NASA no estima que este asteroide colisione con la Tierra.