Los disparos despertaron el temor de los residentes en el lugar, donde algunas personas, escondidas y de forma discreta, captaron las imágenes del violento momento.
«Es el Dicrim y unos tigueres ahí. Ay Dios, el corazón me está matando», se escucha decir a una de las personas que presenció el enfrentamiento, mientras clamaban a Dios.
Las víctimas mortales fueron llevadas al Hospital Doctor Vinicio Calventi, centro que se mantiene bajo un contingente policial.
En medio de la desesperación, familiares de los fallecidos llegaron al hospital en busca de respuestas sobre sus parientes.
De su lado, la Policía Nacional y el Departamento de Investigaciones Criminales (DICRIM) realizan las indagatorias de lugar para esclarecer en qué circunstancias se originó el enfrentamiento.