El comerciante fue identificado como Daniel Antonio Rodríguez Céspedes (El Químico), de 43 años. Era ingeniero industrial de profesión, estaba casado y tenía dos hijos. También se supo que en la balacera resultó herido uno de los agentes.

De acuerdo al informe policial, el hecho se produjo cuando un contingente de la uniformada se presentó a su residencia a realizar un allanamiento, tocándole la puerta e identificándose de manera formal.

Agregó que el hombre se negó abrir la puerta, procediendo los agentes a derribarla, y donde Rodríguez Céspedes supuestamente se atrincheró en el baño de la casa, realizándole disparos, resultando un agente policial herido en una pierna.

Explicó que esa acción del hoy occiso obligó a los miembros de la institución del orden a repeler la agresión, resultando muerto Rodríguez Céspedes.

Según las autoridades, Rodríguez Céspedes tenía una denuncia en su contra por el hecho de haberle realizado cinco disparos con una arma de fuego a un señor no identificado en medio de una discusión por un roce vehicular de fecha 16 de noviembre de este año.

El allanamiento, dijeron, se produjo mediante orden judicial por agentes policiales adscritos a la Subdirección de Inteligencia (DINTEL), en compañía del equipo SWAT y representantes del Ministerio Público.

La familia del hoy occiso rechaza la versión de la Policía Nacional y mantiene la teoría de que a su pariente lo mandaron a matar.

“Los policías llegaron a la casa de Daniel como a las 5:00 de la madrugada y rompieron la puerta, pero él pensaba que eran ladrones y disparó contra ellos, lo que supuestamente ocasionó que le dispararan”, explicó Fausto García, su cuñado.

En la comunidad se comenta que la Policía se llevó las cámaras de vigilancia instaladas en la vivienda y recogió los casquillos sin esperar a los miembros de la Policía Científica, en una aparente violación al procedimiento correspondiente.

Pero el informe policial indica que la Policía Científica colectó como evidencia una pistola marca Sarsilmaz, calibre 9mm, y un chaleco antibalas, dos cargadores de pistola, todo esto en poder del Ministerio Público.