Sostuvo que en un principio se iba a someter a la justicia al segundo teniente de la Fuerza Aérea Dominicana (FARD) Jovanny Roustand Ramos por faltar a la autoridad policial y los protocolos, pero que las partes hicieron un acuerdo en la que su familia reconocía que el disparo que causó la herida mortal a Marisela Roustand, de 47 años, se produjo de manera involuntaria.

El convenio al que habían arribado las dos partes se produjo mientras Marisela Roustand recibía atenciones médicas y, según el hospital, se encontraba “estable dentro de su cuadro clínico”.

El disparo, que le causó una lesión al antebrazo derecho, colon y perforación intestinal a la mujer lo hizo el custodio Juan Rochet Rojas cuando el miembro de la FARD forcejeó con él después de darle “una galleta” “que rodó”, explicó la Reyes. La señora falleció el sábado.

Según narró, el jueves 20 de este mes, minutos antes del incidente, la hoy occisa insistió en que se le quitara las esposas a su otro hermano, el reo Renso Roustand Ramos y al agente negarse, llamaron a Jovanny, quien llegó muy airado al hospital.

El recluso Renso estaba ingresado desde hacía una semana en el centro de salud, pero el jueves 20 fue el primer día que se envió al agente de la policía, asignado a la Dirección General de Prisiones, a custodiarlo.

Cumple la condena de 10 años de prisión por causar una herida a una persona que le provocó la muerte durante una riña en un colmado en Sabana Perdida, Santo Domingo Norte.

La fiscal dijo que por el momento el caso se maneja como un homicidio involuntario.

“Le dio una galleta que rodó y en el forcejeo se disparó el tiro que le causó la herida y posterior muerte a la señora (…) Es un segundo teniente que debe conocer que esa custodia estaba cumpliendo órdenes, estaba custodiando un reo”, sentenció.