Tras el accidente el conductor del vehículo emprendió la huida, dejando los cadáveres en el pavimento.
Las identidades de los muertos, un hombre y una mujer, aún se desconoce. Los cuerpos fueron tapados con sábanas que llevaron vecinos del Residencial Villa Progreso Alcarrizos.
Al lugar del accidente se presentaron varios agentes de la DIGESETT y de la Policía Preventiva, para impedir que curiosos se acercaran al lugar y otros agilizaban el tránsito.
Se informó que personas que alegaron ser familiares de las víctimas llegaron en una camioneta blanca y de inmediato montaron en la parte de atrás los dos cadáveres; los llevaron al hospital Vinicio Calventi y al notar que no llegaba el médico legista optaron por llevárselos a un lugar desconocido.