Con este deceso ocurrido al mediodía de ayer viernes, ya son seis los niños fallecidos en los ùltimos días en el hospital Jaime Mota.
El informe preliminar de este nuevo caso señala que el niño, quién estuvo por varios días ingresado en la referida sala, nació con cardiopatía congénita ocasionada por la presencia de alteraciones estructurales del corazón, producidas por defectos en formarse el mismo durante el período embrionario.
Este último bebé era hijo de Julissa de la Rosa, quien tiene domicilio en el municipio de Cabral de esta provincia.
“El alboroto provocado en nuestro hospital por la muerte de los primeros tres niños se profundiza aún más con el deceso de este bebé, ocurrido ayer vienes, precisamente, en momentos que una comisión mixta designada por el Seguro Nacional de Salud investiga estos casos y evalúa la situación del centro asistencial”, dijo una doctora que pidió reserva de su nombre.
Mientras que el boletín epidemiológico de la semana número 15 del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Sinave), del Ministerio de Salud Pública, señala que con el fallecimiento de los primeros recién nacidos, pasó de 38 a 43 el número de defunciones en lo que va de año en el Hospital Regional Universitario Jaime Mota, que el pasado año 2017 fue de 64.
Este boletín no solo preocupa a los más de 400 mil habitantes de la región Enriquillo, donde unos 200 mil son mujeres en edades fértiles, sino también a las autoridades de ese centro de salud, del Ministerio de Salud Pública y el Servicio Nacional de Salud (SNS).
La precariedad en los servicios que ofrece el Jaime Mota a sus pacientes de las provincias Barahona, Pedernales, Bahoruco e Independencia, siempre ha sido atribuida al poco presupuesto que recibe mensual y a la falta de apoyo de las autoridades de los gobiernos de turno que dirigen los organismos de salud a nivel nacional.
Ayer viernes en un encuentro con la prensa, las autoridades de Salud en esta ciudad admitieron el deceso de niños ocurridos la noche del día 25 y las primeras horas de la mañana del 26 del presente mes, dos de los cuales eran procedentes de las provincias Pedernales y Bahoruco, y el tercero de Barahona.
En tanto, que los otros dos, que fallecieron con anterioridad eran hijos de mujeres haitianas residentes en diferentes puntos de esta región, las cuales por diversos problemas, se tardaron en retirar los cadáveres.
(Fuente: El Caribe)