En su nuevo reajuste de sus pronósticos mundiales, el Fondo eleva las previsiones de crecimiento de Latinoamérica para 2018 en una décima respecto de enero, hasta el 2 %, en gran medida por el impulso de Brasil, que aumenta sus previsiones del 1,9 % al 2,3 %.
El sólido crecimiento de México, que se mantiene en el 2,3 % para este año, y la subida de los pronósticos para las economías de Chile (del 3 % al 3,4 %) y Ecuador (del 2,2 % al 2,5 %) han contribuido también a que el FMI incremente sus proyecciones para la región.
El organismo atribuye al "mayor consumo y crecimiento en inversión privada" el aumento de sus estimaciones para Brasil, que verá crecer su economía en un 2,3 % en 2018 y en un 2,5 % en 2019, datos revisados ambos al alza en cuatro décimas respecto a la anterior actualización de hace tres meses.
Por otro lado, el Fondo destaca que la economía de México se beneficiará este año de la revisión al alza del crecimiento de Estados Unidos, que ha visto su proyección aumentada en dos décimas hasta el 2,9 % en 2018.
"Continúa la recuperación gradual del crecimiento en Latinoamérica y el Caribe, una región severamente afectada por la caída de los precios de las materias primas entre 2014 y 2016", señala el FMI en su análisis.
Después de aumentar el 1,3 % en 2017, el Fondo espera que el crecimiento de Latinoamérica se acelere progresivamente del 2 % en 2018 al 2,8 % en 2019, según esta última actualización.
Las cifras de la región, sin embargo, vienen lastradas por la profunda crisis económica que vive Venezuela, con una contracción estimada del 15 % para este año y del 6 % para 2019.
De hecho, el FMI prevé que la inflación en Venezuela ronde el 14.000 por ciento en 2018, alimentada por la pérdida de confianza en la moneda nacional, una situación acrecentada por el colapso en la producción de petróleo y su exportación.
Además, algunos países de la zona han visto reducidas sus expectativas de desarrollo para 2018 con respecto a las últimas perspectivas anunciadas en enero, entre ellos Argentina, que pasa del 2,5 % a 2 %, Colombia (del 3 % al 2,7 %) y Perú (del 4 % al 3,7 %).
La economía argentina, que creció un 2,9 % en 2017, moderará sus progresión en 2018 hasta el 2 % debido "al efecto de la caída de la producción agrícola, así como al ajuste fiscal y monetario necesario para mejorar la sostenibilidad de las finanzas públicas y reducir la alta inflación" del país, señala el informe de Perspectivas Económicas Mundiales del FMI.
En Centroamérica y en la zona caribeña, se espera que Panamá siga creciendo a ritmos superiores al 5 por ciento, concretamente al 5,6 % en 2018 y al 5,8 % en 2019, y que la economía de la República Dominicana progrese un 5,5 % este año y un 5 % el próximo.
En el documento divulgado hoy por la institución dirigida por Christine Lagarde, el Fondo sitúa el crecimiento mundial en un más que saludable 3,9 % tanto para 2018 como para 2019, porcentajes que coincidieron con la última revisión presentada en enero.
La publicación del informe coincide con la asamblea de primavera del FMI y el Banco Mundial (BM), que se celebra esta semana en Washington y a la que están convocados los ministros de Economía y gobernadores de bancos centrales de la mayoría de sus 189 países miembros.
El giro hacia el proteccionismo y el creciente riesgo de guerra comercial entre EEUU y China marcarán este encuentro, cuyos líderes han lamentado que esta pugna eclipse el buen momento económico global, con crecimiento generalizado en todo el mundo.
"Que las principales economías estén coqueteando con la guerra comercial en un momento de expansión económica generalizada puede parecer paradójico, especialmente cuando la expansión depende tanto de la inversión y el comercio", dijo hoy el economista jefe del FMI, Maurice Obstfeld.
El evento será también escenario de una cumbre ministerial del G20, que engloba a las principales economías avanzadas y emergentes, y que este año está presidido por Argentina.
(ListinDiario)