El excanciller de la República dijo que Rondón pasará poco tiempo en prisión y estimó que será remitido a una cárcel de la región Este donde se pueda preservar su integridad.
El representante de la constructora Odebrecht en el país, es acusado por la Procuraduría General de la República de ser la persona que distribuyó 92 millones de dólares entre funcionarios, exfuncionarios, legisladores y exlegisladores para aprobar contratos de préstamos y viabilizar la adjudicación de obras a la referida empresa brasileña.
El representante de la Odebrecht está encartado en el caso junto a otras 13 personas, a quienes el juez de la Instrucción Especial designado por la Suprema Corte de Justicia, Francisco Ortega Polanco, les conoció medida de coerción.
Entrevistado en el programa El Día, por Telesistema, canal 11, Tolentino Dipp, dijo que de acuerdo a la acusación hecha por el Ministerio Público, cree que los imputados del PRM son inocentes, y que la acusación que le hace el presidente de la Odebrecht, Marcelo Odebrecht; y otros ejecutivos de esa multinacional, hay que demostrarla.
Los encartados en el caso Odebrecht son: Víctor Díaz Rúa, exministro de Obras Públicas; el actual exministro de Industria, Comercio y Mipymes, Juan Temístocles Montás; el exadministrador de la CDEEE, Radhamés Segura; el representante de Odebrecht en el país, Ángel Rondón y el abogado Conrado Pittaluga.
Además, el presidente del PRM, Andrés Bautista; el exvicepresidente de la CDEEE, César Sánchez; Máximo De Óleo, exadministrador de la EgeHaina; Roberto Rodríguez, exdirector de INAPA, y el exdiputado Ruddy González.
La semana pasada, una fuente de las “entrañas” de la penitenciaría de La Victoria informó a DominicanosHoy que personas aún no identificadas habrían pagado un millón de dólares para que asesinen al empresario Ángel Rondón Rijo, principal acusado del caso Odebrecht en República Dominicana.
“Ahora es que empieza el pleito”, expresó el imputado Ángel Rondón, a quien el juez Francisco Ortega Polanco envió a la cárcel de La Victoria por un año: “Coño, suéltame, déjame tranquilo”, le dijo el acusado a un agente cuando era trasladado al Palacio de Justicia de Ciudad Nueva.
Las declaraciones fueron emitidas a su salida de la Suprema Corte de Justicia, luego que el juez dictara medida de coerción en contra 13 de los 14 imputados por el caso Odebrecht.
Rondón dijo que “ya tengo un año de prisión en las costillas. Si la justicia es la presión social, debieron ponerle a la Procuraduría presión social”. Insistió en que no hay pruebas y que así lo ha manifestado y llamó irresponsables al juez y al Ministerio Público.
(ImagenesDominicanas)