El Banco Central no elabora el dinero del país, aunque es un referente en seguridad
Cuando recibes un billete o pagas con monedas, es posible que pienses que fueron impresos o acuñados en algún lugar del país. Sin embargo, la realidad es diferente: la República Dominicana no fabrica su propio dinero. De hecho, la última familia de billetes que sustituirá los impresos en el 2023 será elaborada en Alemania.

La producción de dinero impreso y monedas dominicanas está a cargo de empresas internacionales especializadas, seleccionadas mediante licitación por el Banco Central de la República Dominicana (BCRD), entidad que realiza ajustes periódicos para garantizar mayor seguridad en la economía.

Para la emisión de billetes y monedas de 2024, nueve empresas de renombre mundial participaron en el proceso de selección. De ellas, solo tres obtuvieron el derecho de fabricar el "menudo" que circula actualmente en el país.

Conforme al proceso de licitación, la fabricación de las monedas del año pasado fue adjudicada a:

·  Mennica Polska (Polonia) para las monedas de 1 y 5 pesos.

·  Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (España) para las monedas de 10 pesos.

·  Monnaie de Paris (Francia) para las monedas de 25 pesos.

En este contexto, la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre ha producido durante cuatro años las monedas de circulación nacional, tras ganar licitaciones convocadas por el Banco Central en 2010, 2017, 2019 y 2024. La entidad destacó esta fábrica como una de las industrias más importantes y avanzadas del mundo en su especialidad.

El primer peso dominicano fue impreso y acuñado en 1991, con el rostro del patricio Juan Pablo Duarte en una de sus caras y el Escudo Nacional en la otra. Fue elaborado mediante un proceso de electroenchapado en color amarillo oro, con un núcleo de acero multicapa recubierto de latón, una aleación de cobre y zinc.

¿Quién fabrica los billetes dominicanos?

Los billetes dominicanos, históricamente fabricados en sustrato de algodón, seguirán esta tendencia en 2024. Las empresas encargadas de su producción son la Casa de Moneda de Chile (Chile), con los billetes de 50 pesos y la Giesecke + Devrient, Currency Technology, GmbH de Alemania, los de 100, 200, 500 y 2,000 pesos.

¿Qué pasó con el billete de 10 pesos? Las autoridades del Banco Central decidieron en el 2004 suspender la reimpresión de billetes de 10 pesos oro, para dar curso al proyecto de una moneda bimetálica de igual denominación, con el objetivo de completar la trilogía patriótica de los Padres de la Patria con las monedas de 5 y 1 pesos.

De igual manera, decidieron acuñar una moneda de 25 pesos, en lugar de una de 20, que sustituyera a dicho billete, continuando con el patrón de las monedas fraccionarias, cuya escala es de 1, 5, 10, 25 y 50. Dichas monedas metálicas fueron puestas en circulación a partir del 10 de abril de 2006.

La acuñación de la moneda nacional

Antes de la creación del Banco Central y durante la primera intervención norteamericana, la circulación monetaria estaba compuesta por billetes y monedas de denominación oro norteamericano y de otros países, además de los remanentes de algunas monedas fiduciarias del siglo pasado. Esta situación se mantuvo hasta el inicio de la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo. El 21 de febrero de 1937 fue promulgada la Ley 1259, considerada la creadora de la moneda nacional, en la que se establecieron una serie de normas destinadas a regular la acuñación de monedas de todas las denominaciones.

La primera acuñación de monedas se hizo por un valor de 600,000 pesos, en denominaciones de 0.01 hasta 0.50 centavos. No se acuñaron en ese momento piezas por el valor de 1 peso, ya que el billete americano de esa denominación seguiría circulando por un período de tiempo considerable.

La entrada en circulación de las nuevas monedas fue acogida con entusiasmo, aunque escasearon pronto debido a la insuficiente cantidad.

La prueba de los 20 pesos

En 2009, el Banco Central realizó una prueba con billetes de 20 pesos en material polimérico, siguiendo una tendencia mundial que promovía este tipo de impresión por su mayor resistencia al deterioro y la suciedad. Sin embargo, la recepción por parte del público fue poco favorable. Como resultado, en 2014 el Banco Central decidió no continuar con este material y optó por seguir utilizando algodón.

Hoy en día, no hay planes de reintroducir papeletas de polímero en el país, aunque aquellos emitidos en 2010 aún son válidos para transacciones.

Un dinero con sello internacional

El gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu, se ha reunido con representantes de la industria de monedas y billetes para continuar fortaleciendo la regulación, seguridad y diseño del dinero local.

El interés por parte del BCRD es disponer de los mejores materiales y técnicas en la fabricación de las monedas y los billetes que circulen para responder así al constante trabajo que desde la institución se realiza en aras a ser líderes en la región en la implementación de novedades en el sector.

Cada billete y moneda dominicana pasa por estrictos controles de calidad y seguridad antes de llegar a las manos de los ciudadanos que los utilizan en la economía diaria. Entre las medidas de seguridad se incluyen: hilos de seguridad, marcas de agua, imágenes latentes, microimpresiones, marcas para personas con discapacidad visual e isótopos de identidad del BCRD.

Las destacadas industrias que participan en licitaciones del Banco Central

Las siguientes empresas han sido parte de los procesos de licitación para la fabricación del dinero dominicano y son de distintas partes del mundo:

·  Casa de Moneda de Chile (Chile)

·  Fábrica Nacional de Moneda y Timbre - Real Casa de la Moneda (España)

·  Mint of Finland, Ltd. (Finlandia)

·  Mennica Polska, S.A. (Polonia)

·  Monnaie de Paris (Francia)

·  Royal Canadian Mint (Canadá)

·  Royal Dutch Mint (Países Bajos)

·  The Royal Mint Limited (Reino Unido)

·  Mincovna Kremnica, štátny podnik (Eslovaquia)

Loading...
Escrito Por Redaccion
Thursday, February 13, 2025
Compartir:  
Facebook Twitter
<<<< Atras