"Mami, me están maltratando", le comentó a su progenitora, Iris Pérez, quien al confirmar la orina le pidió que no regresara a jugar y lo llevó al médico. Allí los análisis confirmaron que se le había aplicado sustancias que se inyectan a los caballos para mejorar el rendimiento. Una información que el adolescente confirmó y que había rehusado contarles a sus padres.
A escasos días de estar hospitalizado, Ismael murió. Pero el drama no terminó en el cementerio. Dos hermanos suyos, que también se entrenaban en la Yordy Cabrera Baseball Academy, han quedado con secuelas, como taquicardia y alteración en la vista.
Sus padres, Inoel Ureña e Iris Pérez, impotentes, pero con escasos recursos, viajaron a Santiago de los Caballeros y contaron el caso al abogado José Orlando Aracena Peña, de la Fundación Familia Sin Violencia (Funfasinvi), que decidió asumirlo.
"Estoy aquí porque quiero justicia, porque me mataron mi hijo y yo quiero justicia por mi hijo", se ve decir con la voz entrecortada a Inoel Ureña en un video en Tik Tok subido en la cuenta del abogado Russel Aracena, miembro de la referida ONG. "Porque me le estaban inyectando cosas que yo no le he dado orden que me le inyecten a mi hijo y por eso yo quiero justicia".
La querella
El martes, cinco abogados de Funfasinvi presentaron querella formal en la Fiscalía de Santo Domingo Este contra Yordy Cabrera, expelotero que dirige la academia donde habrían ocurrido los hechos.
Buscan que, de forma inmediata, se le conozca medida de coerción y se le imponga prisión preventiva a Cabrera, de 34 años, quien luego de jugar sus primeras cinco temporadas como infielder (2010-2013), se convirtió en lanzador y trabajó por última vez en la temporada 2022-2023 para los Gigantes del Cibao.
Acusan al expelotero de violar los artículos 295, 302, 303 del Código Penal Dominicano, además de la Ley de Salud (42-01), que trata sobre los productos farmacéuticos. También los artículos 397 y 412 del Código para Protección de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes, además de la Ley 50-88 sobre Drogas y Sustancias Controladas.
El Bodedone, conocido como "caballín" en la subcultura beisbolera, es un esteroides que se utiliza para caballos, pero hay una versión dirigida a humanos. Es la sustancia que ha ocasionado suspensiones en la MLB a peloteros como Jenrry Mejía, Abraham Almonte, Jorge Bonifacio, Francis Martes y Noelvi Marte.
Rescate a Esmerling
"Me vi en pánico cuando la familia me contactó, yo que tengo un nieto que está en una academia", dice Aracena a Diario Libre, al teléfono desde Santiago. "Lo más lejos que uno tiene es que a un muchacho le están haciendo experimento con sustancia de caballo. Cuando vienen los scouts los inyectan para presentarle un súper pelotero, se transforman al inyectarlo, pero cuando se van los efectos, muchos se desmoronan", explica el letrado, cuyo caso le movió a ahondar en la industria de desarrollo de peloteros.
La fundación ha tomado como antorcha el caso y lo denomina como "Rescantando a Esmerling", por las secuelas que ha quedado a uno de los jóvenes de la familia.
"Esto la Procuraduría de Niños y Niñas tiene obligatoriamente que empoderarse de esas escuelas (academias) y que tome el control, porque no puede seguir ocurriendo todo esto", insiste Aracena.
Apelan a una serie de ilícito de la ley 136-03 que condena usar sustancias e inyectar a menores sin la autorización de sus padres.
El profesional del derecho explicó que la semana pasada se depositó un primer querellamiento y solicitó que se fusione el expediente, a fin de que la fiscal encargada de la investigación pueda incluir el caso de las tres víctimas.
Cabrera fue firmado por los Atléticos en 2010 y luego pasó por Marlins, Tigres, Gigantes y Dodgers hasta 2019. En la Lidom, fue parte de Estrellas, Escogido, Águilas y Gigantes, además de reforzar en Puerto Rico, México y Canadá.