La víctima, identificada como Wesmi Collado, oriundo del sector Bella Vista, relató que los agentes le dispararon en repetidas ocasiones y le propinaron golpes que dejaron secuelas visibles en su rostro y cuerpo.
Collado afirmó que, a pesar de haberse detenido en un lugar más iluminado y visible, los policías abrieron fuego contra su vehículo, hiriéndolo gravemente. Uno de los proyectiles le rozó la frente, causando daños en su ojo derecho, del cual teme perder la visión.
El joven, quien recientemente regresó de los Estados Unidos, fue trasladado de inmediato a un centro de salud tras el incidente.
Collado exigió justicia, señalando que los agentes policiales pusieron su vida en peligro con su accionar.
El hecho ocurrió el pasado jueves 3 de octubre, pero hasta el momento las autoridades policiales no se han pronunciado sobre el caso.