El pasado jueves 15 de agosto, día en que ocurrió el hecho, Ana Josefa llamó a su esposo mientras él se dirigía al trabajo, pidiéndole que regresara a casa porque "había problema". Según el documento acusatorio del Ministerio Público, ella se negó a dar más detalles por teléfono.
Esmerlin Javier Frías Martínez, padre de la víctima Elianna Frías García, no pudo salir del trabajo, pero su esposa insistió en llamarlo. Para que comprendiera la gravedad de la situación, le hizo una videollamada, durante la cual él pudo ver sangre en la casa.
Frías Martínez llamó a su vecina del apartamento del frente y le pidió que fuera a la casa para ver qué estaba ocurriendo. Luego, llamó al teléfono de la casa, donde su hijo de cinco años respondió. Le pidió que abriera la puerta para que la vecina pudiera entrar, ya que estaba cerrada por dentro.
Cuando la vecina ingresa a la casa se encuentra con la fatídica escena. El cuerpo de la niña decapitado en el área de la cocina del apartamento 302 del Residencial La Razón I, ubicado en el sector Hainamosa, en Santo Domingo Este.
El documento del órgano acusador señaló que la mujer fue arrestada en "flagrante delito" por miembros de la Policía Nacional.
El juez Leomar Cruz Quezada, de la Oficina de Atención Permanente de Santo Domingo Este, ordenó el martes 20 de agosto que la acusada cumpla un año de prisión preventiva en Najayo Mujeres, sin embargo, aun no ha sido trasladada al penal. Además, debe ser sometida a una evaluación psiquiátrica por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).
La mujer padece de esquizofrenia desde hace 11 años
El abogado de la imputada, Juan Concepción, aseguró que su defendida sufre de esquizofrenia desde hace 11 años y que tomaba medicamentos por esta condición.
Concepción manifestó que la mujer había sido medicada por el psiquiatra Martin Emilio Guillén, quien falleció. Mostró a Diario Libre una supuesta prescripción médica de fecha 18 de febrero de 2013.