El vocero de la Presidencia, Homero Figueroa, dijo que esa acción parece ser resultado de “una aparente malinterpretación por parte de los ciudadanos haitianos con respecto a los límites fronterizos que separan a ambos países”.

Para establecer la actual frontera entre la República Dominicana y Haití, indicó, se colocaron 311 pirámides de cemento numeradas en serie, comenzando en el norte, en la desembocadura del río Dajabón o Masacre, terminando en la desembocadura del río Pedernales, al sur.

Todas estas pirámides están marcadas con el número, el país donde están ubicadas y el año 1929.

La pirámide 13 marca el límite fronterizo en esta zona en particular y el territorio de la carretera internacional entre la valla perimetral y la pirámide 13 pertenece a la República Dominicana.

“El Ejército de la República Dominicana tiene la plena potestad de realizar el patrullaje en dicha zona”, aseguró el funcionario.

Afortunadamente, declaró Figueroa, “el incidente no escaló debido al manejo profesional de nuestros soldados, quienes actuaron con prudencia y respeto por los derechos humanos, acuerdos y tratados internacionales”.

Sin embargo, precisó, “como medida preventiva y para garantizar la seguridad en la zona, el Ejército ha decidido incrementar el número de soldados y el patrullaje vehicular en el área”.

Asimismo, precisó que el Gobierno dominicano considera esta acción como “una provocación”, con el objetivo de generar “un conflicto de consecuencias imprevisibles que solo conseguirá agravar las relaciones entre ambos países. Exigimos que las autoridades detengan este tipo de violaciones de forma inmediata”.

También, advirtió de que el gobierno cumplirá el mandato constitucional de preservar la soberanía y el territorio dominicano.

Militares dominicanos y ciudadanos haitianos protagonizaron ayer un encontronazo, cuando un grupo de ese país manifestó su inconformidad con el patrullaje de agentes de República Dominicana al frente de la verja perimetral construidas entre ambas naciones.

Según informes, los haitianos tienen semanas mostrando su desacuerdo con ese patrullaje, alegando que todo el territorio que va desde la verja perimetral hacia Haití no es tierra dominicana, por lo que el Ejército de República Dominicana no puede penetrar la verja.

Sin embargo, las autoridades dominicanas han indicado que la construcción del muro se realiza metros antes de los bornes fronterizos de República Dominicana y Haití, por lo que todavía existe una pequeña parte del terreno que yace después de la verja que pertenece al país.

El encontronazo de este martes llevó a que los agentes que patrullaban el área fueran complementados por un amplio contingente del Ejército, para garantizar la integridad del territorio, de acuerdo con datos ofrecidos por medios locales.

Así, fusiles en manos se encontraban soldados del Ejército en la zona de La Vigía, donde grupos haitianos han provocado disturbios para tratar de impedir patrullajes en el perímetro fronterizo al otro lado del muro y que corresponde al territorio dominicano.

Los haitianos han estado denunciando, desde hace varias semanas, que el territorio que ha quedado al otro lado del muro pertenece a su país y que los soldados no pueden cruzar hacia esa parte.