La legisladora deberá demostrar, mediante pruebas que presente su abogado, de que los más de RD$2,593 millones que colocó en el mercado financiero no fueron adquiridos de manera de ilícita, sino mediante salario de su profesión como odontóloga, y ahora siendo diputada.
Según el Ministerio Público, la imputada Rosa Amelia, y su esposo Micky López, utilizaron a personas y empresas ligadas a ellos para lavar el dinero obtenido de narcotráfico mediante préstamos millonarios con el objetivo de colocarlos al sistema financiero.