Esperanza Jean dejó un inmenso dolor entre sus familiares, quienes aseguraron que la bebé no padecía de ninguna enfermedad y estaba en buen estado de salud. 

El padre de la menor, quien es de nacionalidad haitiana, expresó a Diario Libre que cada mañana antes de irse al trabajo le daba un beso a la niña para despedirse. Al observarla, indicó que miró en ella un semblante distinto y una mosca muerta de un lado de su nariz.

De acuerdo con Belony Jean, sintió que la niña no respiraba, por lo que empezó a llamar a sus vecinos, quienes inmediatamente hicieron contacto con el Sistema Nacional de Atención a Emergencias 9-1-1. Al llegar el personal médico, estos trasladaron a la menor al hospital Santo Socorro, sin embargo, ya era tarde.

"Yo le tocaba la barriga y le topaba y me le acerque y no estaba respirando. La niña estaba bien, estaba en salud y feliz", manifestó su padre, quien asegura vive el dolor más grande de su vida con la pérdida de la infanta.

Al hablar de la niña, Belony indicó que tanto su esposa como él decidieron ponerle el nombre de Esperanza a la bebé, porque justo eso era lo que ella significaba para ellos: "una esperanza". Llegó a sus vidas para darles alegría y en quien tenían la confianza de ver un buen futuro tras la inteligencia que proyectaba a su corta edad.

Su padre recordó con tristeza y con sus ojos llorosos lo alegres que estaban en familia el pasado domingo 09 de junio, donde compartieron con la bebé y le estaban haciendo videos y fotos por lo grande y saludable que se veía.

El cuerpo de la niña permanece en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) del Cementerio Cristo Redentor. 

Sobre la muerte súbita

De acuerdo con los datos publicados en la página oficial del reconocido hospital de Estados Unidos, Mayo Clinic, la muerte infantil súbita es el deceso sin causa aparente que ocurre mayormente durante el sueño de un bebé saludable, menor de un año.

Agrega que el síndrome de muerte infantil súbita también se le denomina muerte en la cuna, debido a que en muchas ocasiones el infante muere ahí.

Aunque los galenos no han dado con la causa, aseguran que esta condición podría asociarse con anomalías en la porción del cerebro del bebé que controla la respiración y la vuelta al estado de vigilia.

La página del hospital agrega que varios científicos han establecido que lo mejor sería colocar al bebé boca arriba a la hora de acostarlo a dormir.

El pediatra neonatólogo indicó en una ocasión a Diario Libre que esta condición se puede prevenir haciendo una evaluación de rutina a todos los niños, aunque parezcan sanos, y evaluando bien de cerca y dando consejería genética a aquellas familias con historia de muerte súbita o enfermedad cardiaca. 

A todos los niños en su primer año de vida, además del seguimiento de rutina: medición de la estatura, de su cabeza, del peso, vacunas y cambios en la alimentación, es necesario hacer algunos tamizajes para prevenir enfermedades y asegurarles su salud y bienestar.