Tras recibir informes de inteligencia, los agentes antinarcóticos, militares y unidades caninas, inspeccionaron varios contenedores vacíos que estaban en uno de los depósitos de la terminal, cuando detectaron inconsistencias en la estructura de uno de los vagones.
Luego, en presencia de un fiscal, se inició el protocolo de verificación, logrando descubrir en el piso del contenedor un doble fondo, donde se ocuparon los 58 paquetes, con un peso total de 59.55 kilogramos de cocaína, según el análisis del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).
De manera preliminar se ha establecido que el contenedor iba a ser enviado en un vuelo comercial hasta Alemania.
El Ministerio Público y la DNCD han iniciado una investigación en relación a la frustrada operación de narcotráfico internacional y esperan ofrecer mayores detalles conforme avance el proceso.
Los paquetes fueron enviados al Inacif para los fines correspondientes.