El barril de Brent del Mar del Norte para entrega en julio terminó en alza de 1,12% a 69,32 dólares en Londres.
En Nueva York el barril de WTI para entrega en junio ganó 1,22% a 66,08 dólares.
Las reservas comerciales de petróleo crudo en Estados Unidos bajaron en 400.000 barriles en la semana que terminó el 7 de mayo, menos de lo esperado por los analistas, según el informe semanal de la Agencia de Información sobre Energía (EIA).
Los stocks de crudo bajaron a 484,7 millones de barriles (mb) la semana pasada, según el reporte difundido el miércoles por la EIA, que fue elaborado antes del ciberataque sufrido por una de las principales transportadoras de crudo de Estados Unidos, Colonial Pipeline.
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Los analistas interrogados por la agencia Bloomberg esperaban un descenso de 2,1 millones de barriles.
– ¿Escasez? –
“Para el mercado las preocupaciones giran en torno al oleoducto, no a las reservas”, resumió Andy Lipow, presidente de la consultora Lipow Oil Associates.
Luego de ese ataque cibernético, el pánico de los automovilistas en busca de gasolina en la costa este de Estados Unidos se extendió el miércoles, seis días después del cierre del inmenso oleoducto de Colonial Pipeline.
Una docena de estados, desde Florida hasta Virginia, declararon el estado de urgencia, una decisión que reforzó el estrés de los consumidores que llegaban a las estaciones de servicio con bidones.
“La percepción del público es que la escasez es grave y hay que llenar el tanque”, comentó Lipow.
“Resulta que la demanda de gasolina es dos o tres veces mayor que lo habitual, lo cual agrava la situación”, añadió el analista.
En Florida, el 73% de las gasolineras de la región de Pensacola registraban escasez de gasolina, según Patrick De Haan, del sitio especializado en precios de carburante GasBuddy.
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En todo el estado de Carolina del Norte, casi una de cada tres estaciones de servicio no tiene gasolina, y la cifra es de 6 en 10 en Atlanta, la capital de Georgia.
En Virgnia y en Washington DC un 10% de las gasolineras están desabastecidas, según la misma fuente.
Colonial Pipeline anunció que espera restablecer lo esencial de sus actividades hacia el fin de semana. Un ataque de ‘ransomware’ el viernes obligó a la compañía a cerrar toda su red.
El miércoles la firma informó del reinicio de operaciones hacia las 21H00 GMT. En su comunicado, precisó que requerirá “varios días” antes de volver la operativa a la normalidad en una red que transporta 45% de la gasolina, el gasoil y el carburante de avión desde las refinerías del Golfo de México hasta la costa este.
Antes, el presidente Joe Biden indicó el miércoles que habría “buenas noticias” en las próximas 24 horas. Según el mandatario, el gobierno estuvo “en contacto cercano” con Colonial Pipeline y la situación “está en vías de controlarse”.
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Para aliviar la situación, el gobierno de Biden concedió a partir del domingo mayor flexibilidad para el transporte de productos refinados por carretera.
El martes, la Agencia de Protección Ambiental (EPA) otorgó “una exención temporal para garantizar que haya un suministro adecuado de gasolina disponible en las áreas afectadas hasta que se pueda restablecer el suministro normal a la región”.
La medida de la EPA suspende las reglas de aire limpio que requieren que las áreas urbanas usen combustible con aditivos que hacen que la gasolina sea menos contaminante pero también más cara.
Esta disposición regirá hasta el 18 de mayo y concierne a la capital, Washington DC, así como a los estados de Maryland, Pensilvania y Virginia.
Ante la desesperación de los conductores, la agencia de protección de los consumidores lanzó una advertencia: “No llenen bolsas de nylon con gasolina. Sí, puede parecer evidente. Pero cuando alguien está desesperado, no reflexiona correctamente”, señaló en un tuit acompañado de una imagen de una explosión violenta.