Roberto Jiménez, a quien apodaban “El Pollero”, llevaba varios años residiendo en Panamá y se había hecho muy popular por el pollo asado con yuca y tostones que vendía frente a un bar de la avenida Cuba, en el barrio Calidonia.
Su cuerpo, vestido con un sueter y un pantalón corto, fue hallado flotando boca arriba, poco después de las 12:00 de la noche del miércoles.
Las autoridades aún desconocen si murió ahogado o en otras circunstancias.
Esperan los resultados de la necropsia para determinar cuáles fueron las causas su muerte.