El suceso ocurrió en Nueva Écija, Filipinas, cuando Lilybeth Marvel, de 37 años, fue grabada mientras visitaba un café internet para llevarle comida y alimentar con sus propias manos a su hijo Carlito, de 13 años, quien no dejó de jugar un videojuego en línea mientras su madre le ponía la comida en la boca.
Según el portal Daily Mail, Carlito, quien sufre de adicción a los videojuegos, estaba en un maratón de 48 horas jugando en línea, por lo que su madre decidió brindarle comida para que no sufriera de hambre. Lilybeth asegura que ella y su esposo están tratando de lidiar con la adicción de su hijo, el cual dejó de asistir a la escuela por jugar en línea.