Aunque todavía está en curso la investigación, todo apunta a que en el origen del drama se encuentra una fuga de gas, ya que los bomberos había recibido una llamada en este sentido y varios de ellos estaban operando en la zona.

El ministro francés del Interior, Christophe Castaner, ha advertido de que el balance de víctimas puede ser más "fuerte y grave" de lo que en principio se había anunciado (una veintena de heridos, dos de ellos muy graves).

En las redes sociales, circulan vídeos y fotografías de los instantes posteriores a la deflagración.

Decenas de bomberos acudieron inmediatamente a la zona para intentar sofocar las llamas, sobre las que se alzaba una nube de humo visible desde gran parte de la ciudad. También están presentes numerosos policías, ya que las calles de París están tomadas por las fuerzas de seguridad debido a una nueva jornada de protesta de los "chalecos amarillos".

París vive este tipo de episodios con gran angustia, ya que se sabe en el punto de mira del terrorismo yihadista. El pasado mes de diciembre, Francia elevó el nivel de alerta antiterrorista durante unos días tras el atentado de Estrasburgo, aunque lo rebajó después de que las fuerzas del orden abatieran al autor del tiroteo contra el famoso mercado navideño de la ciudad.

Hace apenas unos días, la capital francesa conmemoró el cuarto aniversario del atentado contra la sede de la revista satírica "Charlie Hebdo", en el que murieron 11 periodistas y un policía. Diez meses más tarde, el 13 noviembre de 2015, el mundo se estremeció con el sangriento atentado perpetrado por un comando yihadista en la capital francesa, dejando más de 130 muertos y cientos de heridos.

(Fuente: Euronews)