El dinero fue a parar a las cuentas del exmandatario en tres ingresos, que ahora llevaran a Razak a declarar en tres causas por blanqueo. Estos cargos se suman a los tres de abuso de confianza y a otro de abuso de poder a los que se enfrenta el expresidente.
La nueva acusación conlleva una pena hasta 15 años de cárcel y una posible multa cinco veces mayor al dinero recibido de forma presuntamente ilegal. Razak fundó el fondo de inversión estatal 1MDB tras llegar al Gobierno en 2009.