Poco después de matar a Acevedo Gómez, Castillo, les dijo a los policías “llévenme, acabo de matar a mi esposa”.

Él se declaró culpable en la Corte Superior del Distrito de Lynn y se le negó una fianza solicitada por su abogado defensor.

Es acusado de asesinato en primer grado, cargos de violencia doméstica que desembocó en fatalidad y posesión de un arma criminal que es el bate.

Los fiscales dijeron que Castillo, quien eran empleado de la cadena de tiendas “Americraft” en el pueblo de Lowell como marcador de cajas (Box Marker), mató a batazos a su esposa en el apartamento que ambos compartían desde hace varios años en la calle Chase, donde los policías llegaron a las 4:45 de la madrugada el 27 de marzo de este año.

Familiares de la muerta llamaron desde la República Dominicana a unos amigos, para que fueran al apartamento y verificaran si ella estaba bien, ignorando el trágico suceso.

La policía dijo que los agentes enviados al apartamento encontraron muerta a la dominicana.

"Adelante. Llévame. Maté a mi esposa", dijo Castillo cuando la policía llegó a la escena. La policía llamó a un hermano del confeso asesino que vive en Nueva Jersey y dijo que Castillo habló con él para decirle que había asesinado su esposa y quería entregarse.

"Llamó a su madre y le dijo que estaba preocupada porque tenía problemas con su esposo", dijo un amigo de la familia que pidió anonimato. "Es una tragedia", dijo el declarante.

El mismo amigo dijo que la pareja había vivido en el apartamento de Lynn durante varios años y que se habían casado hacía algunos años. No procrearon hijos, pero Acevedo tuvo tres de una relación anterior que viven en la República Dominicana.

Castillo también es originario de la

El abogado John Apruzzese que representa a Castillo, se negó a comentar sobre la posible sentencia de cadena perpetua.