Excolaboradores de la campaña de Donald Trump son acusados de conspiración contra EE.UU.
El exdirector de la campaña de Donald Trump, Paul Manafort, y el también exfuncionario de esa campaña Rick Gates se entregaron este lunes al fiscal especial del Departamento de Justicia Robert Mueller en el marco de la investigación sobre la injerencia rusa en las elecciones estadounidenses de 2016.

Gates es socio de negocios de Manafort, con quien trabaja desde mediados de la década de 2000, y fue su mano derecha en la campaña de Trump. Ambos fueron acusados bajo secreto de sumario el viernes, dijo una fuente próxima al caso a CNN.

La acusación contra ambos, que se dio a conocer este lunes, contiene 12 cargos: conspiración contra Estados Unidos, conspiración para lavar dinero, agente no registrado de un director extranjero, declaraciones falsas y engañosas contra la Ley de Registro de Agentes Extranjeros (FARA), declaraciones falsas y siete cargos por no entregar informes sobre cuentas en bancos extranjeros y cuentas financieras.

Manafort llegó a la oficina del FBI en Washington el lunes por la mañana. Los dos se están procesando por separado, según una fuente oficial. Más tarde serán llevados a una corte federal en Washington el lunes por la mañana.

Los dos comparecerán ante la jueza magistrada de distrito, Deborah Robinson, a la 1:30 p.m. ET del lunes.

CNN se ha tratado de poner en contacto con los abogados de Manafort y Gates.

Una fuente próxima a la Casa Blanca dijo que la mala conducta de ambos tiene poco que ver con la campaña de Trump o la investigación sobre Rusia.

“Estos hombres eran malos cuando comenzaron, y eran malos cuando se marcharon", dijo la fuente.

Sobre los cargos en el auto de procesamiento, la fuente dijo que "no tienen nada que ver con ninguna relación con Rusia" y afirmó que todo esto "no tiene nada que ver" con el presidente Trump.

Nueva etapa

La acusación contra un alto funcionario de la campaña del presidente Trump marca una nueva etapa en la investigación de Mueller por posible colusión entre el gobierno ruso y miembros del equipo de Trump.

Manafort, cuyos trabajos para el expresidente ucraniano Viktor Yanukovych han atraído el escrutinio de los investigadores federales, ha negado hasta el momento cualquier delito financiero por sus pagos relacionados con Ucrania, sus cuentas bancarias en paraísos en el extranjero y sus diversas transacciones inmobiliarias a lo largo de los años.

Son las primeras personas en la órbita de Trump acusadas en el marco de la investigación del fiscal especial, que explora si las acciones de Trump relacionadas con el despido del exdirector del FBI James Comey fueron obstrucción a la justicia. Mueller ha adoptado un enfoque amplio en su labor que incluye las transacciones financieras del equipo de Trump.

Antes de la acusación, el FBI allanó la casa de Manafort en Alexandria, Virginia, y confiscó documentos fiscales y financieros, incluidos algunos que ya se habían entregado a los investigadores del Congreso.

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Escrito Por Redacción A
Monday, October 30, 2017
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