4
MIAMI: Florida ejecuta a un hombre por un doble asesinato en el 1983
El estado de Florida ejecutó a Michael Ray Lambrix, de 57 años y condenado a muerte por un doble asesinato ocurrido en 1983 en una zona rural del centro del estado, tras una noche de alcohol.
Lambrix, a quien declararon muerto a las 22.10 hora local (2.00 GMT del viernes), recibió en la Prisión Estatal de Florida, en el norte del estado, una inyección letal por el doble asesinato de Clarence Moore y Aleisha Bryant, a quienes conoció en un bar la noche del suceso y los invitó a su casa rodante.
El ejecutado tuvo como última comida el menú típico de la celebración de noviembre de Acción de Gracias en Estados Unidos, compuesto por pavo horneado, puré de papa y judías verdes.
Poco antes, la Corte Suprema de Estados Unidos denegó un pedido de suspensión de la ejecución, hecho por sus abogados, en un escueto escrito en el que no expuso los motivos de la negativa.
Lambrix fue condenado por las muertes de Moore y Bryant durante una larga noche de alcohol, en la que acabó con la vida del primero con una barra de metal y luego pateó en la cabeza y estranguló a Bryant, tras lo cual enterró a las víctimas, según la acusación.
Lambrix, que pasó 33 años en el corredor de la muerte, defendió su inocencia esta semana durante un encuentro con periodistas, en donde dio su versión de los hechos, según la cual mató a Moore en defensa propia después de que éste acabara con la vida de Bryant.
Consideró, en ese sentido, que su ejecución iba a ser “un asesinato a sangre fría”.
Acompañando la solicitud hecha por su abogado, William Hennisen, el condenado envió un manuscrito al Tribunal Supremo de EE.UU. con el que buscó detener que le apliquen la inyección letal.
Con una ejecución inicialmente prevista para el pasado 11 de febrero, el preso se convirtió hoy en el segundo, tras la ejecución en agosto pasado de Mark James Asay, también por asesinato, en recibir la inyección letal tras el limbo legal en el que permaneció Florida.
En enero de 2016, el Tribunal Supremo de EE.UU. calificó de “inconstitucional” la forma como Florida decidía las penas capitales, decisión que obligó al estado a cambiar el proceso y ahora la pena se decide por “unanimidad” del jurado, no por mayoría simple.
Florida, junto con Alabama y Delaware, era uno de los pocos estados que no requería un veredicto unánime del jurado para sentenciar a un condenado a la pena de muerte.
De hecho, Lambrix fue sentenciado tras dos votaciones del jurado de 8-4 y 10-2, y que si bien ahora son inconstitucionales no fue favorecido con la decisión del Tribunal Supremo, que señaló que el nuevo sistema de este tipo de sentencias se debe aplicar de manera retroactiva a partir del año 2002.
Con la ejecución de hoy, suman 94 los condenados a muerte en Florida que han sido ejecutados desde 1976. Actualmente, unas 400 personas, cuatro de ellas mujeres, esperan en el corredor de la muerte su ejecución mediante inyección letal.
Desde 1991, el año en el que hubo más ejecuciones en Estados Unidos fue 1999 (98) y en 2005 se registró la cifra más baja (28).
Con Lambrix, un total de 1.461 personas han sido ejecutadas en EEUU desde que el Tribunal Supremo reinstauró la pena de muerte hace cuatro décadas en todo el país.
Escrito Por
Redacción R
Friday, October 6, 2017