Las acusaciones contra Juana Galarza, Pablo Nunez, Brandon Williams, Luis Vargas, Carlos Valverde, Jean Herrera, Christian Perez, Richard Lovell y Steven Reese, de Brooklyn que fueron presentadas en el Tribunal Supremo de El Bronx.
Los cargos van desde posesión de bienes robados, conspiración en cuarto grado y posesión de 32 motocicletas robadas.
En otro expediente separado fueron imputados de venta de estupefacientes Juan Galarza, Jeremey Collazo y Jhon Vasquez Ramos.
El fiscal general Eric T. Schneiderman manifestó en un comunicado que “peligrosas redes criminales como esta amenazan con traer violencia a nuestras comunidades”.
“Ya sea que se dediquen a robar vehículos de lujo o a vender drogas, los someteremos con el máximo peso de la ley”, agregó.
Dijo que “mi oficina no permitirá que Nueva York se convierta en un semillero del crimen internacional”.
La investigación que culminó con el desmantelamiento de la red fue denominada “Operación Roba Caballos”.
La banda ubicaba las motocicletas de alta demanda, como Ducatis, le rompían el eje del timón y luego las subían a una van para llevárselas.
Los demandados desarmarían las motocicletas en piezas y las empaquetarían para su envío.
La banda estaba integrada por individuos con distintas habilidades, entre ellos uno que robaba y rompía los mecanismos de bloqueo de las motocicletas, otro las montaba en una camioneta, uno que las transportaba y otro que las vendía.
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