Los manifestantes bloquearon calles, incluyendo la autopista 101, y se enfrentaron a las fuerzas del orden lanzando piedras, botellas, fuegos artificiales y cócteles Molotov.

Se reportaron incendios a vehículos y contenedores, saqueos en tiendas, y daños a edificios civiles, incluyendo las dependencias de ICE y la sede policial .

El presidente Trump desplegó unilateralmente a 2,000 soldados de la Guardia Nacional, junto con Marines en reserva, bajo la autoridad del Título 10 — una medida sin precedentes en casi 60 años sin consentimiento estatal. En ese sentido, el gobernador Gavin Newsom y la alcaldesa Karen Bass han condenado el despliegue como una intromisión ilegal y provocadora que agrava la situación.

Este lunes siguen los operativos de ICE y las autoridades federales advierten que se mantendrán los operativos diarios. Los oficiales han restablecido el orden en el centro de LA y reabrieron calles y transportes, aunque se mantiene una fuerte presencia militar y policial.