Además, 2.212 personas resultaron heridas y 1.494 fueron secuestradas, según las cifras de la oficina, con sede en Ginebra.
«Estas cifras por sí solas no pueden captar el horror absoluto en Haití, pero muestran la violencia incesante a la que se está sometiendo a la población», señaló el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk.