Los ataques han dañado infraestructuras para la generación de energía de calefacción, así como instalaciones de alto voltaje en seis regiones diferentes, indicó el ministro de Energía, Herman Galushchenko.
Las situaciones más difíciles se están viviendo en las regiones de Zaporiyia (sur), Járkov (norte) y Jmelnytskyi (oeste) y los trabajadores de la red eléctrica están trabajando sin descanso para restablecer el suministro, agregó.
«El principal objetivo de Rusia fueron una vez más las plantas de generación de electricidad y las instalaciones de alto voltaje», indicó por su parte la operadora de la red eléctrica, Ukrenergo, en un comunicado.
En Járkov se han introducido cortes de emergencia, mientras que en Jmelnytskyi y en las regiones de Odesa (sur) y Kiev (centro) se están produciendo restricciones, añadió esta fuente.