A qué se debe
En la mayoría de los casos, el enrojecimiento de los ojos se debe a la hinchazón o dilatación de los vasos sanguíneos. Esto provoca que la superficie ocular luzca roja o inyectada en sangre. Esto puede tener un origen alérgico, viral o bacteriano. Una vez que sepas qué lo causa, puedes poner en práctica algunos de los siguientes cuidados caseros.
Antes que nada
Si tienes conjuntivitis, pasan los días y sientes que empeora, tienes dolor, problemas para ver o sensibilidad a la luz, hay pus, moco en abundancia o algún otro síntoma de infección, como fiebre o malestar, debes acudir al oftalmólogo. Recuerda que los cuidados caseros no servirán para tratar una afección severa.
Primeras medidas
Si usas lentes de contacto, evítalos mientras tu ojo se encuentre enrojecido. Cuando vuelvas a usarlos, límpialos muy bien, o mejor aún, compra un par nuevo. También olvídate del maquillaje para los ojos mientras tengas este malestar.
¿Bacteriano o viral?
El ojo rojo viral es como el resfriado: no hay un tratamiento para el virus y se alivia al cabo de unos días. Si el origen es bacteriano, puede tratarse con antibióticos prescritos por un médico. Ambos se pueden contagiar fácilmente, por lo que se aconseja limitar el contacto con otras personas y no compartir objetos de uso personal.
Cómo controlarlo
Para reducir los síntomas, sea bacteriano o viral, puedes poner una toalla húmeda tibia (que no suelte pelusa y no gotee) sobre tus ojos por unos minutos. Cada vez que apliques las compresas, usa otra toalla limpia para no diseminar la infección. También puedes tomar ibuprofeno u otro analgésico de venta libre.
Alergia
Si tu conjuntivitis es producida por alergias, es importante que te alejes de la fuente que la causó: polen, moho, polvo, productos químicos o incluso tus mascotas, entre otras variables. La irritación continuará si sigues en contacto con cualquier cosa que la esté causando. Este tipo de afección no es contagiosa, así que puedes continuar con tu rutina.
Cómo controlarlo
Para aliviar el ojo rojo alérgico puedes tomar algún antialérgico, también colocar una toalla con agua fría sobre tus ojos durante unos minutos. Si sientes resequedad, aplica gotas lubricantes de venta libre (también conocidas como lágrimas artificiales).
Cuidados
Si tienes la infección en un solo ojo, debes tomar algunas medidas para no contagiar el otro, pues la higiene básica no es suficiente. Cambia las fundas de las almohadas, sábanas y toallas a diario, lávate las manos con agua y jabón frecuentemente (sobre todo si tocas tus ojos) y no compartas objetos personales.
Otras precauciones
Recuerda que Internet está lleno de malos consejos para tratar diferentes afecciones, incluido el cuidado del ojo rojo. Por ello, nunca apliques en tus ojos sustancias que no hayan sido aprobadas por tu médico, y no olvides que los extractos herbales no son estériles y pueden empeorar mucho más las cosas.