El limón es una fruta rica en vitamina C, como expone la Fundación Española de la Nutrición (FEN). Además, también “posee cantidades menores de otras vitaminas y minerales”. Pero, lo mejor es que es atemporal, por lo que la podemos encontrar en el supermercado todo el año.

Consumir agua de limón puede ser ventajoso para las personas que son estreñidas. La razón está en que esta fruta tiene una gran cantidad de fibra, como bien señala el Servicio de Endocrinología y Nutrición de SACYL. Pero, para que su efecto sea mayor, se recomienda beber el agua de limón cuando esté tibia.

Un aspecto fundamental es que beber agua de limón puede ser la excusa perfecta para tomar ese primer vaso de agua del día tan necesario para el organismo. La mayoría de las personas no beben mucha agua y añadirle algo de sabor puede ayudarles a aumentar su consumo. Pero, no es conveniente abusar de esta bebida. Con unas pequeñas gotas es suficiente, ya que es una fruta ácida y esto puede ser nocivo para las personas que sufren acidez estomacal.

Por último, también se suele llamar la atención sobre el poder antioxidante que tiene el agua de limón. Sin embargo, este solo está en su cáscara que contiene hesperidina, “un compuesto que tiene una función protectora frente a la radiación UVA y frente al estrés oxidativo celular”, como recoge la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD).

Mitos del agua de limón en ayunas

Los beneficios que posee el limón no son muy diferentes a los que puede tener cualquier otra fruta. No obstante, existen varios mitos que circulan sobre el limón que no podemos tomar como ciertos. El más importante es que tomado con agua en ayunas ayuda a adelgazar. Como señala la FEN, esto se basa en que se cree que “ingerir todas las mañanas el zumo de unos cuantos limones sin azúcar […] disuelve la grasa“. Una creencia completamente falsa porque “la ingestión de un exceso de ácido puede ser muy perjudicial”.

El agua con limón también se cree que puede ser provechosa para aquellas personas que sufren halitosis, debido a que favorece la producción de saliva. Aunque, un Manual de Enfermería Oncológica advierte que esto es “un estimulante de las glándulas salivares y puede producir hipertrofia de las mismas, causando dolor en la cavidad oral”.

Además, algunos expertos afirman que el agua de limón puede disolver los cálculos renales. Sin embargo, no existen estudios suficientes que puedan apoyar esta otra ventaja.

Como podemos ver, el agua de limón en ayunas tiene algunos beneficios, aunque esa capacidad para adelgazar, el mito que más invita a su consumo, no es cierta. No obstante, para lidiar contra el estreñimiento o aumentar la ingesta diaria de agua puede ser una opción. Eso sí, recordemos utilizar solo unas pocas gotas de limón.