El dietista-nutricionista de la Academia Española de Nutrición y Dietética, Manuel Moñino, expresa que una ración de este tipo de pescado aporta el triple de ácidos grasos omega-3 recomendados por jornada. Si se encuentra combinado con aceites naturales los beneficios para la salud son aún mayor de lo que se cree.
“Al ponerlas en conserva, la espina del pescado se degrada y el calcio que contiene, que de por sí ya es alto, se funde en la carne, aumentando su biodisponibilidad”, apunta el especialista.
El alto contenido de fósforo, hierro, selenio y vitamina B12, ayudan al desarrollo de las células sanguíneas.