Consumismo atrapa a jóvenes dominicanos
Es frecuente ver que en muchas ocasiones ya sea por moda, gusto o simplemente por lograr posicionarse en una escala que la sociedad exige, algunos jóvenes se envuelven en modelos de consumo que los atrapa y los deja sin salida. El consumismo en la juventud es cada vez más frecuente, por ello se hace necesario tratarlo.


Para la especialista del centro Vida y Familia, Mary Karmen Murillo, el consumismo es la acumulación o compra de bienes y servicios considerados no esenciales y que genera nuevas necesidades que provocan el deseo de artículos que no son indispensables para el sano desarrollo humano, causando así falta de identidad debido a que no conocen las necesidades esenciales.


De acuerdo con Murillo la cultura y la presión social influyen a que cada vez sea más frecuente el consumismo en la juventud debido a que éste modelo provoca que muchos sobrevaloren las cosas materiales y no se sientan satisfechos con nada a tal punto que los lleva a sentir rechazo al esfuerzo y el sacrificio.


“Hace un tiempo atrás, no hacían falta muchas cosas para ser feliz, bastaba con tener un techo, el alimento suficiente y el medio justo para conseguir suplir las necesidades básicas. Hoy no basta con cubrir nuestras necesidades para estar bien con uno mismo. Siempre hay que tener más, consumir lo último, lo mejor, lo que está de moda y si no podemos hacerlo no nos sentimos bien con nosotros mismos y somos infelices”, afirma la experta.


Una de las áreas en las que es notable el problema en la juventud es en la tecnología, apunta Murillo, sin embargo también existen otros aspectos que juegan un papel fundamental para que el joven se vuelva consumista de productos innecesarios como son la alimentación, la moda y su influencia, el tabaco, las drogas y el alcoholismo.


La especialista en conducta humana sostiene que la causa más importante por la que algunos jóvenes consumen compulsivamente es porque no se sienten felices y buscan sobrevivir en una sociedad “donde te miden por lo que tienes y no por lo que eres”.


El materialismo es causa y al mismo tiempo efecto directo de esa tendencia inmoderada de adquirir, gastar o consumir bienes porque cuando los jóvenes tienen este tipo de conducta, el comprar objetos produce placer y éste a su vez adicción, lo que ocasiona un sentimiento de amor hacia lo material.


La experta añade que la publicidad es la precursora principal del modelo de consumo, ya que a su juicio consigue hacerle creer a las personas que consumiendo cualquier producto puede resolver sus problemas.


Para la especialista del centro Vida y Familia, el rol principal de los padres es educar y prevenir, para lo cual recomienda hacer los siguientes ejercicios:


• Garantizarles a sus hijos un hogar estable donde exista el amor, armonía y ejemplaridad

• Evitar que sus hijos manipulen mucho dinero hasta que tengan la responsabilidad para hacerlo.

• No pierda las oportunidad de mostrarle su satisfacción ante conductas positivas y de a ellos mayor énfasis.

• Incentive a sus hijos sean niños, adolescentes o jóvenes a una utilización adecuada del tiempo libre y estilos de vidas sana.

• Mantener una comunicación abierta y afectiva con sus hijos. Los padres son el modelo más importante para sus hijos.


“EL BINOMIO DAÑINO”


Consumismo + materialismo = carencia La doctora enfatiza que el consumismo más el materialismo produce carencia, por lo que asegura que cuando los jóvenes reciben lo material que desean, sólo reciben una felicidad momentánea, “se trata de una alegría efímera e ilusoria, que termina justo en el momento en que logramos lo que queríamos y en ese instante volvemos a sentir el vacío de antes, nos enfocamos, entonces, en un nuevo producto que deseamos comprar para lograr estar bien y felices”. Añade que esto hace que exista un círculo vicioso, el cual se convierte en un estilo de vida que se confunde erróneamente, “la felicidad no depende de ningún objeto material, ni siquiera de otra persona, comienza y termina en uno mismo”.


OPINIÓN JOVEN


Palabras claves


Aquellos que tienen niños, hermanos o primos pequeños se darán cuenta que casi para todo se le pregunta: ¿Cómo se dice? En busca de la palabra correspondiente a la acción que el menor desea. Los infantes se ven en la necesidad de decir: gracias, permiso, perdón, disculpa o por favor. Sin embargo, muchas personas que se consideran “adultas, educadas y maduras” destierran de su “culto” vocabulario algunos de estos enunciados, que muchos bebés usan a diario.


El amor


El amor es uno de los sentimientos más importantes en la vida de cualquier ser humano. Amar, incluye respetar, ser generoso, cariñoso, atento, hacerse responsable de quien dice amar y desearle lo mejor siempre, incluso aún sabiendo que ya no estará a tu lado. Pero el único amor verdadero que permanece y permanecerá a pesar de los tiempos es Dios. “Dios siempre te sustentará con la diestra de su justicia,” así nos dice a través de la Biblia.


Afrontando cambios


En la vida, los cambios son inevitables, pero eso no significa que sea fácil aceptarlos. Algunos vienen de repente, otros te preparan para afrontarlos, pero lo que sí tienen en común es que son para bien. A veces no entendemos el por que de las cosas, y es en ese momento justo que debemos de acudir a la resiliencia, que no es más que la capacidad para adaptarse a los cambios y superar las adversidades. Confía, y cuando menos lo esperes, todo tendrá sentido.


Loading...
Escrito Por Redacción A
Friday, August 18, 2017
Compartir:  
Facebook Twitter
<<<< Atras