Las propiedades nutricionales de la fresa son ampliamente conocidas y estudiadas. Mucho se ha escrito de su contenido de vitamina C y de potasio. Además, se le reconoce por su poder antioxidante y no falta en las listas de los frutos que promueven la salud y la belleza.

Pero este fruto, que puedes adquirir en cualquier supermercado o hasta debajo de un semáforo, tiene la capacidad de evocar ideas que rebasan el ámbito alimenticio. Su llamativo color rojo se asocia con el amor, su forma recuerda a la de un corazón y su tamaño la hace ideal para compartir en pareja.

Por todo lo anterior -aparte de su sabor y textura-, la fresa no puede faltar en un menú especial del Día de San Valentín.

Recetas tan famosas como las fresas con crema o las fresas recubiertas de chocolate son fáciles de hacer y degustar.

Anímate a prepararlas y alimenta el romance. 

Seduce con fresas

Para crear un menú romántico en el Día de los Enamorados no tienes que recurrir a un recurso tan obvio como cortar los alimentos en forma de corazón. Con emplear fresas tendrás una referencia más sutil -y a la vez jugosa- al romance.

Puedes servirlas en el desayuno, el almuerzo o la cena; compartirlas frescas (acompañadas con un vino espumante) o como ingrediente principal de alguna receta; preparar con ellas una bebida, aperitivo, ensalada o postre... no importa. Lo relevante es aderezarlas con una buena dosis de amor.

Toma nota de estas recetas. A menos, claro, que tu pareja sea alérgica a las fresas, resultan ideales para celebrar San Valentín.