El agua sirve para eliminar desechos a través de la orina, el sudor y la defecación, mantener la temperatura normal, lubricar y acolchonar las articulaciones y proteger tejidos sensibles
Beber agua es totalmente esencial en la vida, pero beberla antes de ir a la cama podría estar interrumpiendo tu ciclo de sueño, y probablemente ni siquiera te hayas dado cuenta.
“Siempre aconsejo a mis clientes que dejen de beber agua dos horas antes de acostarse por una buena razón: interrumpe sus ciclos de sueño”, explico la experta en sueño y psicóloga del bienestar, Leva Kubiliute.
Consecuencias de beber agua en la noche
La profesional dijo que beber agua unos minutos antes de irse a la cama aumenta las probabilidades de desarrollar una sobrehidratación, y que puede repercutir a largo plazo en tu sueño. “Si tienes un exceso de líquidos en tu organismo, es posible que necesites ir al baño por la noche”.
Por ende, “esto puede interrumpir tu ciclo de sueño, afectando negativamente a la calidad del mismo. Si no solucionas el sueño interrumpido, puedes desarrollar una privación del sueño”, finalizó.
Sin embargo, el exceso de agua también es malo, ya que produce una disminución de sodio en la sangre que puede provocar, una sintomatología que será más grave dependiendo más de la rapidez de instauración que de la concentración de sodio.
No todo es malo
Es importante señalar que la ingesta de líquidos probablemente sea adecuada si rara vez se tiene sed por la noche antes de dormir o si la orina es incolora o de color amarillo claro.
Según un estudio realizado en Suiza por la universidad de Friburgo, beber agua antes de dormir y mantenerse hidratado durante el sueño reduce la frecuencia cardiaca y disminuye la presión arterial: alo que el cuerpo agradece al disminuir la carga del trabajo cardíaco.