Bajo ese perfil de grandes dimensiones y orientación familiar se esconde el SUV de gasolina más potente que General Motors (GM) jamás haya fabricado. De hecho, la marca lo define como el “SUV grande más potente de la historia”, algo bastante creíble dadas sus cifras, muy altas en cualquier ámbito del conjunto. Así que, es hora de conocer un poco más a fondo al Cadillac Escalade-V 2023.
Como decíamos, la pieza central aquí es el propulsor, y el Escalade-V tiene uno bien grande: un V8 de 6.2 litros sobrealimentado por compresor volumétrico, bastante similar al que se encuentra en el CT5-V Blackwing. Pero en el Escalade-V, ese bloque tiene un compresor aún más grande que el del súper sedán estadounidense: 2,65 litros, para ser exactos. Eso es más grande que la mayoría de los motores a la venta hoy. Y como el Dodge Durango SRT Hellcat ya no se fabrica, efectivamente, sí que puede ir pregonando que el SUV más potente del mundo (por ahora).
Aunque pesa la nada modesta cifra de 2.820 kilos en su vertiente de batalla corta (3.071 mm), con 682 CV y 885 Nm, el Cadillac Escalade-V es capaz de completar la carrera de 0 a 100 km/h en 4,4 segundos y completar el cuarto de milla en 12,74 segundos a 177 km/h. Cadillac dice que no solo la transmisión –de 10 relaciones– está específicamente afinada para la naturaleza deportiva de la Escalade-V, sino que también la distribución del par es específica . En circunstancias normales, la energía se reparte equitativamente entre las ruedas delanteras y traseras.
Cuando se requiere, la Escalade-V puede enviar hasta el 67 % de la potencia al eje posterior, lo que tiene sentido para un vehículo que desplazará bastante peso hacia atrás al acelerar con fuerza. Sin embargo, la gestión no sería posible sin una buena suspensión. En este caso, el enorme SUV acoge la cuarta generación del Magnetic Ride Control de GM junto con suspensión Air Ride Adaptive y un hardware que mejora el conjunto de la suspensión para el modelo. Las cámaras de aire traseras, por ejemplo, son más rígidas que las delanteras para ayudar a salir más rápido.
Con cierta lógica, Cadillac también ha incorporado diferentes modos de conducción que se pueden aplicar específicamente a componentes como la dirección o la suspensión, incluidos Tour y Sport. Incluso hay un modo Nieve/Hielo bastante práctico. Teniendo en cuenta que esta cosa tiene más potencia que la muchos de los deportivos a la venta en Estados Unidos (mercado principal para el Escalade-V), estamos un poco impresionados de que se hayan contenido lo suficiente como para no poner algún tipo de configuración del “Race” o “Track”, es decir, para circuitos.
Por dentro, es un Escalade bastante estándar, con algunos toques adicionales. Esta vertiente tiene su propio cuadro de instrumentos con un tacómetro central, así como un pequeño logotipo de la V a las seis en punto en el volante. Todos los Escalade-V vienen con el interior Platinum, que incluye detalles en cuero negro y madera “zebra”. El llavero tiene el mismo color que los frenos, que aquí se muestran en Edge Red. Como el culmen de la gama Escalade, el modelo recibe la navegación de realidad aumentada y el sistema de audio AKG de 38 altavoces de serie.
El sistema de conducción semiautónomo “Super Cruise” de GM con modo de remolque y cambio de carril automático también llega al Escalade-V, pero será un extra que no está disponible desde el principio. Con este sistema, alabado por los usuarios y la prensa especializada, estamos seguros de que nunca más llegarás tarde a una reunión de la Asociación de Padres y Maestros, a un tiroteo en movimiento o a cerrar un negocio de tráfico de drogas. En estos últimos casos, es aconsejable optar por un tono grisáceo o negro; quizá el rojo es excesivamente llamativo.
En lo que respecta a su estética, el Cadillac Escalade-V 2023 destaca con un rediseño en todo el exterior. En la parte delantera del vehículo está presente la parrilla Sport Mesh negra utilizada en otros modelos V. Además, los ligeros pellizcos y pliegues hacen que la parte delantera y trasera se vean más atléticas. En cada esquina, los compradores encontrarán ruedas únicas de 22 pulgadas, así como frenos delanteros Brembo hechos a medida con pinzas de freno Edge Red y una salida de escape cuádruple integrada en un falso difusor en el mismo color de la carrocería.
Cadillac iniste en que este SUV de alto rendimiento será un producto de bajo volumen, aunque la marca no ha especificado si se trata de un número de ejemplares limitados o que, simplemente, no esperan vender demasiados. El precio de partida de este monstruo estadounidense parte desde los 149.990 dólares para la versión de batalla corta, unos 140.000 euros al tipo de cambio actual. Una tarifa cercana a otros competidores directos como el BMW X7 M60i xDrive, el Mercedes-AMG GLS 63 4Matic+, el Audi SQ8 o el Porsche Cayenne Turbo GT.