Pero centrémonos en el nuevo Jeep Wrangler 4xe. Como muchos de vosotros sabéis, el Wrangler es considerado uno de los mejores todo terreno del mundo desde hace mucho tiempo. De hecho, es uno de los pocos todo terreno puros que aún siguen en el mercado. Con esta hibridación, ahora es el Wrangler más capaz y ecológico de la historia.
Sistema propulsión y baterías
Este modelo híbrido enchufable utiliza dos motores eléctricos y un motor térmico de gasolina. Uno de los motores eléctricos está integrado en el cigüeñal y es el que reemplaza al tradicional alternador, gestionando el sistema Start & Stop, generando electricidad para las baterías y haciendo también de motor de arranque. Por su parte, el segundo motor eléctrico va montado en la caja de cambios TorqueFlite, que es de convertidor de par con 8 velocidades.
Mientras tanto, y aunque la marca no ha comunicado muchos detalles, el motor térmico es un 2.0 litros de cuatro cilindros en línea de gasolina con turbo. Pertenece a la familia de “Motores de Medio Tamaño Globales” (GME, por las siglas en inglés) del fabricante. Sin embargo, no sabemos prestaciones ni datos específicos.
Según Jeep, las baterías de iones de litio generan 400 voltios y tienen 17 kWh y 96 celdas. Este paquete se equipa bajo la segunda fila de asientos para mejorar la protección de las mismas. Eso sí, han tenido que reacondicionar esta zona y los propios asientos para poder alojarlo y permitir un fácil acceso a las mismas. Por cierto, el puerto de carga eléctrica está en la aleta delantera izquierda.
El Jeep Wrangler obtiene un rendimiento máximo de 375 CV y 637 Nm cuando el sistema propulsor eléctrico y térmico trabajan en conjunto. Aunque aún no ha sido homologado, la marca comenta que es capaz de recorrer unos 40 kilómetros en modo 100 % eléctrico, sin utilizar el motor térmico.
Como no podía ser de otra forma, el Jeep Wrangler 4xe tiene varios modos de funcionamiento para el sistema propulsor híbrido. La marca lo denomina E Select. El conductor puede seleccionar cada uno de ellos, y son: Híbrido, Eléctrico y eSave.
El modo Híbrido es una especie de modo automático que es el que se inicia por defecto. Trata de utilizar primero la energía eléctrica de la batería, tirando del motor térmico cuando la batería se va agotando. En modo EV solo recibe potencia eléctrica salvo en aceleración repentina o cuando se acaba la carga eléctrica. Por último, el eSave prioriza el uso del motor térmico para reservar la batería para cuando el conductor considere necesaria.
4xe, Sahara 4xe y Rubicon 4xe, tres versiones disponibles
Pese a que se trata de un híbrido, no debemos confundirnos. Sigue siendo el mismo todoterreno de grandes capacidades de siempre. El Jeep Wrangler PHEV está disponible con tres niveles de acabado, que son 4xe, Sahara 4xe y Rubicon 4xe. Los dos primeros vienen con transmisión 4×4 permanente y caja de transferencia de dos velocidades con reductora a 2.72:1. El diferencial trasero de deslizamiento limitado Trac-Lok es opcional.
Por su parte, el Jeep Wrangler Rubicon 4xe incorpora el sistema 4×4 Rock-Trac con reductora 4:1, bloque de diferenciales delantero y trasero, así como articulación y recorridos de la suspensión mejorados con desconexión de la barra estabilizadora. En definitiva, más soluciones para una conducción muy extrema fuera del asfalto.
No falta en todas las versiones el control de descenso y ascenso de pendientes, ganchos de remolque, placas protectoras o llantas de 17 pulgadas con neumáticos específicos. Por cierto, sus cotas más importantes son 44 grados de ataque, 22,5 de ventral y 35,6 de salida, con una distancia al suelo de 51 centímetros y 76 centímetros de capacidad de vadeo; que se dice pronto.
10 colores (+1) para la carrocería
El diseño es totalmente reconocible como el de un Jeep Wrangler. El modelo americano ofrece diez colores para la carrocería, que son negro, blanco brillante, rojo, gri granito, amarillo, azul, verde grisáceo, granate, verde y plata, además del azul Electric Blue que es exclusivo para el acabado Rubicon.