No es gratuito que las grandes armadoras y constructoras automotrices estén mirando hacia ese sitio, invirtiendo billones de dólares en investigación y mejoras tecnológicas, pero, ¿qué ha cambiado como para que ahora todos vean lo que parecía una utopía como una enorme realidad?

1- La autonomía ya no es problema

Seamos sinceros, salvo que estés planeando un viaje a través del país, el rango de millas que puedes recorrer en un EV resulta algo importante. Cargar en casa una batería durante la noche te bastará para recorrer entre 100 y 300 millas, según el modelo, además de que cada vez es más común encontrar cargadores de amplio rango de voltaje en sitios públicos.

2- No somos ‘guerreros del camino’

Afrontémoslo, el 78 por ciento de los habitantes de los Estados Unidos recorren menos de 40 millas diarias, el 90 menos de 50, por lo que un auto como el Chevrolet Bolt o el Tesla Model 3 que te brindan 200 millas o el Nissan Leaf con 150, son suficientes para casi cualquiera.

3- Es mucho más barato

Sí, lo sabemos, el costo de compra del vehículo puede parecer mayor, pero los automóviles eléctricos no consumen gasolina ni otro derivado del petróleo, así que en realidad gastarás menos de la mitad en energía y si hablamos del mantenimiento, no hay competencia alguna.

4- Son más seguros

Imagina un impacto frontal en un auto convencional. Bueno, pues te diremos que las partes metálicas del motor son armas mortales, mismas que son inexistentes en un auto eléctrico. Sus materiales se deforman con los impactos y absorben la energía del golpe antes de que entre a la cabina.

Si esto no te ha convencido, recuerda que en muchos estados existen bonos y reducción de impuestos a quienes adquieran automóviles eléctricos.