El extranjero fue identificado como Mario Jack Oliver, de 71 años de edad. Residía en el sector de Las Ballenas.
Las primeras hipótesis apuntan a que antisociales irrumpieron en la vivienda del hombre y sustrajeron varios relojes de la marca Rolex. Asimismo, una caja fuerte.
Al lugar del hecho se presentaron miembros de la Policía Nacional, el DICRIM acompañados del Magistrado Reinaldo Quevedo y la médico legista la Dra. Karen, quienes certificaron que el fallecimiento se produjo por trauma craneal y comprensión manual en el cuello (ahorcado).
El cuerpo sin vida del estadounidense está en el Instituto de Ciencia Forense (INACIF) de San Francisco de Macorís para fines de investigación.