Se trata de la joven Luisanna Prieto, quien explicó que la pasada semana envió el aparato hacia la ciudad de Santiago a una persona identificada como Pamela, quien le presentó un comprobante de transferencia por 11,150 pesos, recursos que nunca cayeron en su cuenta.
La denunciante señala que tardó unos días para querellarse, por entender que era una transferencia interbancaria que podría tardarse unos días.