El coronel José Poché, comandante de la regional Cibao Sur de la Policía, identificó a la víctima como Julio César Reynoso Rondón, de 43 años de edad, quien falleció a causa de los tres impactos de bala que le hicieron los dos hombres que se desplazaban en una motocicleta.
El empleado del consorcio de bancas de loterías Don Miguel, era encargado de colectar el dinero de las ventas, y tras ser herido por los desconocidos, fue trasladado a la clínica Dr. Paredes en Cotuí, donde certificaron su fallecimiento.
Miembros de la subdirección de Investigaciones Criminales (Dicrim) en Cotuí, iniciaron las investigaciones en procura de identificar, capturar y someter a la justicia a los responsables del crimen de Reynoso Rondón.
El cadáver del supervisor de bancas de lotería Don Miguel fue enviado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) de San Francisco, para fines de la autopsia de ley.