El occiso fue identificado como Francisco Quezada Acosta, de 63 años de edad, quien para quitarse la vida utilizó una soga de nylon la cual ató a una rama del referido árbol.
De acuerdo a las indagatorias realizadas por las autoridades, se precisó que de acuerdo a declaraciones de su hijo Randy Francisco Quezada, este le manifestó que su padre se había levantado en la mañana y había salido de la residencia en pantalones cortos dejando todas sus pertenencia en la casa, dejando una carta escrita donde, se despedía de ellos y al mismo tiempo le pedía excusa por lo que iba a hacer, pero que las deudas que tenia lo llevaban a hacerlo.
Asimismo, se determinó que en este hecho no hubo participación de manos criminales, por lo cual el médico legista Julián Emilio Boden y el procurador fiscal adjunto Elintong Santiago, que actuaron en el caso, ordenaron la entrega del cadáver a sus parientes para darle cristiana sepultura.