Según fuentes, el «Brujo Rey Ramírez», de presunto haitiano, y sus familiares utilizaron de manera irregular los documentos de una madre dominicana y sus hijos legítimos. Este esquema permitió al grupo usar identidades y cédulas dominicanas que no les correspondían.
La medida de la JCE busca restaurar la identidad legítima de la familia dominicana afectada y enfrentar la sustracción de documentos de identidad civil.
Amenazas a la JCE
Tras la cancelación de sus documentos, que lo dejan sin estatus legal reconocido en el país, el «Brujo Rey Ramírez» ha lanzado amenazas directas contra miembros de la Junta Central Electoral, exigiendo que le sean devueltos los documentos que, según el organismo, no pertenecen ni a él ni a su progenitora, sino a la familia dominicana cuya identidad fue robada.