Los manifestantes denunciaron que el plantel lleva más de 15 días sin energía eléctrica debido a un supuesto retraso en los pagos por parte de las autoridades educativas. Además, señalaron que la falta de agua potable dificulta el funcionamiento normal de la institución y afecta tanto a estudiantes como a docentes.
“Exigimos soluciones inmediatas. No podemos continuar sin electricidad ni agua en un espacio donde los niños vienen a aprender”, expresó uno de los padres durante la protesta.
Los manifestantes advirtieron que, si no reciben respuestas concretas por parte de las autoridades competentes, intensificarán sus medidas, llevando su protesta a las calles de la ciudad.
La movilización contó con el respaldo de colectivos populares, quienes aseguraron que apoyarán la lucha hasta que se resuelvan estas problemáticas que consideran inadmisibles en un centro educativo.