Treinta años de prisión es lo que exigen comunitarios de Barraquito, para el nombrado Lucas Polanco Peña, alias Ñoño, por la muerte de José Miguel Liriano, conocido como Estarlin.
Concentrados en la parte frontal del Palacio de Justicia de esta ciudad, los dolientes de Liriano pidieron la pena máxima contra el homicida.
Denunciaron además un supuesto abuso de poder por parte de un hermano del victimario, a quien responsabilizan de cualquier eventualidad que les pudiera ocurrir.
Aseguran que se trató de un asesinato, no así, que habría actuado en defensa propia como manifestó al momento de su arresto.