Se trata de Ángela Mena Cepeda, de 41 años de edad, cuyo cadáver fue encontrado ensangrentado en la cama de una de las habitaciones de la cabaña Villa San Francisco de esta localidad.
Se presume que se trató de un suicidio, debido a que fue encontrado próximo al cadáver, una navaja, con el cual se habría cortado en el cuello. Además, fue encontrada una carta manuscrita en la que se despide y pide perdón a sus familiares.
Una unidad del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), conjuntamente con funcionarios del Ministerio Público y el Departamento de Investigaciones Criminales (DICRIM) de la Policía Nacional, realizaron el levantamiento del cadáver.
Según familiares, la fémina sufría de depresión. La mujer que dejó dos niños en la orfandad, era oriunda del municipio de Las Guáranas.