El presidente Joe Biden firmó el intercambio, que tuvo lugar en los Emiratos Árabes Unidos, aunque significó dejar atrás a Paul Whelan, un ejecutivo de seguridad corporativa estadounidense que permanece encarcelado en Rusia.
La medida marca uno de los intercambios de prisioneros de más alto perfil entre Moscú y Washington desde la Guerra Fría, con el Kremlin presenciando el regreso de Viktor Bout, a quien el presidente ruso Vladimir Putin ha querido recuperar, y que había cumplido 11 años de prisión, una sentencia de 25 años en los Estados Unidos.
Tras ser condenada por contrabandear aceite de cannabis, llevan a Brittney Griner a penitenciaría rusa
Durante su detención, Rusia había evitado comentar la posibilidad de canjes de presos.