Así, el bloque inicial acabó 28-20 para los campeones de la Conferencia Oeste.
El repertorio de los Lakers se estiró en el segundo cuarto, que finalizó con un tanteador de 64-36. Con Butler deslucido, tal vez ya resentido de su lesión y un Adebayo impreciso, los californianos estiraron la ventaja con facilidad y sin la necesidad de recaer en LeBron. Fue Rondo el que brilló frente al aro y llegó a 13 puntos.
El Heat apenas logró marcar 13 puntos en ese período y falló más de la mitad de sus tiros libres, lo que denotó un cansancio mental en varias de sus figuras que se mostraron ahogadas en cada intento de ataque.
Esta performance se repitió en el tercer cuarto que terminó con un 87-58 a favor de Los Lakers. Todo se encaminó a un claro triunfo y consagración del conjunto de Los Ángeles con un marcador final de 106-93.
LeBron cortó con una sequía de una década en Los Ángeles, que lograron su último anillo en las definiciones del 2010 ante Boston Celtics. El Rey, por su lado, sumó el cuarto título a sus vitrinas con 35 años tras lo hecho en 2012 y 2013 con Miami y en 2016 con Cleveland Cavaliers.