La mayoría de los jugadores de los Azulejos llegaron a principios de esta semana para el entrenamiento de primavera 2.0 en Toronto, donde residirán en un hotel conectado al Centro Rogers, el campo donde van a disputar los partidos de locales.
Según la cadena de televisión TSN, el equipo ha informado a sus jugadores que podrían enfrentar una multa de 750.000 dólares, así como un posible tiempo en la cárcel, si son descubiertos en otro lugar que no sea el estadio o el hotel.
El equipo cumpliría con las normas establecidas y denunciaría ante las autoridades policiales el abandono de los jugadores de la concentración, donde han llegado de manera libre y sin ningún tipo de presión.
El manejador de los Azulejos, el puertorriqueño Charlie Montoyo, declaró el pasado miércoles que 46 jugadores se encuentran actualmente en Toronto preparándose para la apertura de temporada, el 24 de julio contra los Rays de Tampa Bay.
Una docena de miembros del equipo permanecen en las instalaciones de Azulejos en Florida luego de un informe en el que se revela el positivo por coronavirus de un jugador que estuvo en contacto cercano con 11 compañeros de equipo.
El pasado 19 de junio, los Azulejos, que militan en la Liga Americana, cerraron sus instalaciones de entrenamiento en Florida después de que uno de sus jugadores mostró síntomas del virus.
Días después, según los informes, se descubrió que varios jugadores y miembros del personal habían contratado COVID-19.
Sin embargo, no se ha revelado de quiénes se trata.
Los jugadores en Florida deben registrar dos pruebas negativas antes de ser autorizados para volar a Canadá, donde podrían reintegrarse con el equipo.